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El sector de la construcción se encuentra en el centro de un proceso de descarbonización crítico para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en la actualidad. Esta afirmación fue enfatizada por un panel de expertos en sostenibilidad el pasado 20 de septiembre en Fescomad 2023, compuesto por José María García Gómez (Viceconsejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid), María Teresa de Diego Fernández (Vocal de la Junta Directiva de AEICE), Ana Bernabéu Rodríguez (Adjunta Secretaría de Políticas Públicas y Empleo, CCOO del Hábitat) y Ana María García Hervás ((Miembro de la Secretaría de Seguridad y Salud, Medio Ambiente y Sostenibilidad, UGT-FICA), quienes analizaron diversos aspectos clave del sector durante la mesa redonda.

Uno de los desafíos más destacados que enfrenta el sector de la construcción es la necesidad de atraer a talentos jóvenes. La renovación generacional es esencial para impulsar la innovación y la adopción de prácticas más sostenibles en la industria. Además, la construcción industrializada y la digitalización se presentan como oportunidades significativas para mejorar la eficiencia de los procesos productivos, lo que podría resultar en la creación de empleos atractivos para los jóvenes profesionales. Estas tendencias deben ser aprovechadas para atraer y retener el talento en el sector.

La formación continua también se considera crucial en este contexto. La idea de que las competencias tienen una fecha de caducidad impone la necesidad de un enfoque en la formación permanente. En contraste con el modelo tradicional de "maestro y aprendiz", la formación constante es esencial para mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías en la industria.

La renovación urbana se presenta como una necesidad apremiante para mejorar la calidad de vida de las personas. Muchas viviendas existentes pueden y deben ser mejoradas desde el punto de vista de la sostenibilidad y la eficiencia energética. Esto no solo contribuiría a reducir las emisiones de CO2, sino que también mejoraría la comodidad y la habitabilidad de estos espacios urbanos.

El panel de expertos enfatizó la importancia de continuar brindando apoyo financiero para la descarbonización del sector. Las estrategias de mitigación y adaptación son esenciales para abordar el impacto del cambio climático en la construcción y promover prácticas sostenibles.

Ana Bernabéu destacó la innovación en materiales y técnicas, como la construcción modular, como el camino principal en la evolución del sector. Establecer la neutralidad energética para el año 2050 es un objetivo importante, pero factible con el respaldo adecuado de las administraciones. Esto implica que las autoridades desempeñarán un papel fundamental en la promoción de prácticas más sostenibles y en la incentivación de la adopción de tecnologías limpias. El "Plan Vive Madrid", que promueve viviendas eficientes energéticamente y la construcción industrializada, fue puesto como un ejemplo de iniciativa en esta dirección. Aunque la construcción industrializada puede inicialmente tener un costo ligeramente superior (alrededor del 10%), se espera que a medida que aumente la demanda, los precios se igualen gracias a las economías de escala.

María Teresa de Diego subrayó la importancia de los criterios de eficiencia, que incluyen la sostenibilidad, el costo, las emisiones y la demanda. Es esencial difundir casos de éxito en el sector de la construcción para inspirar a otros a adoptar prácticas más sostenibles.

Las ayudas a la rehabilitación de viviendas también fueron resaltadas como un elemento crucial. Dado que gran parte del parque de viviendas es antiguo y poco eficiente desde el punto de vista energético, la rehabilitación no solo aumenta el valor de las propiedades, sino que también mejora la eficiencia energética.

En resumen, el sector de la construcción se enfrenta a una serie de desafíos y oportunidades cruciales. Estos incluyen la atracción de talento joven, la adopción de enfoques más eficientes y sostenibles, la promoción de la formación continua, la renovación urbana, la inversión en investigación y desarrollo, y la rehabilitación de viviendas. Para abordar estos desafíos, es esencial contar con normativas ágiles y apropiadas, así como con el respaldo continuo de las administraciones y la promoción de prácticas sostenibles en toda la industria.