Científicos relacionan la temperatura y el color del pavimento para saber cuáles de sus compuestos pueden tener un impacto negativo al medio ambiente
Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desarrollaron un pavimento el cual podría mitigar las emisiones de gases efecto invernadero. El pavimento tiene como innovación la capacidad de regular la temperatura de la superficie que, por el momento, son impenetrables debido a la densidad de los materiales con que son construidas.
Los pavimentos son una superficie urbana abundante que cubre alrededor del 40% de las ciudades en Estados Unidos. Además de ser la vía de transporte en el país estadounidense, son una fuente de calor la cual puede aumentar la temperatura del aire hasta 4,2 grados Celsius.
En respuesta, los científicos del MIT Concrete Sustainability están estudiando cómo una superficie puede disminuir la intensidad del calor que emana. Su investigación se centró en "Pavimentos fríos", es decir, un pavimento que refleja más radiación solar y emite menos calor en comparación a las superficies pavimentadas convencionales.
Su informe describe cómo los pavimentos fríos pueden reducir las temperaturas del aire hasta en un 2,1 grados Celsius y 1,7 grados Celsius en las ciudades de Boston y Phoenix, respectivamente. "Lograr estos ahorros requiere de estrategias de pavimento frío basándose en el clima, tránsito y las configuraciones de cada ciudad", afirmó Hessam AzariJafri, coautor del estudio.
Hessam AzariJafri también explicó que las superficies con un bajo nivel de albedo (métrica para medir la reflectividad de una superficie), absorben más luz y tienden a ser más oscuras. En cambio, cuando las superficies tienen un alto índice de albedo son más brillantes y reflejan más luz.
Algunos materiales como el hormigón son capaces de reflejar la luz del sol para regular la temperatura del pavimento, y disminuir la temperatura de las construcciones. "Las superficies con un alto índice de albedo suelen ser más brillantes y reflejan más luz, esto les permite tener temperaturas bajas", señaló AzariJafri.
Para una comprensión integral de los beneficios ambientales de los pavimentos fríos, los investigadores tuvieron que mirar más allá de los materiales convencionales con que se construyen caminos. Ello dio como resultado una clasificación de tres tipos de pavimento: asfalto reflectante, concreto y concreto reflectante.
Esta clasificación les permitió también analizar los impactos incorporados para todo tipo de pavimentos y el efecto del tipo de pavimento en el exceso de consumo de combustible del vehículo. "Hicimos un análisis del impacto ambiental del pavimento calculando tres factores la rigidez y la tasa de deterioro de la superficie" apuntó AzariJafri.
Hasta el momento, los científicos del MIT están trabajando en un nuevo proyecto, el cual permitirá estudiar a fondo cada uno de los materiales con el objetivo de crear cemento más amigable con el medio ambiente. Para ello, quiere guiar futuros proyectos de pavimentación fresca de carreteras y caminos en Estados Unidos a fin de ayudar a las ciudades y hacer frente al cambio climático.